CAPERUCITA AZUL CELESTE
Ahí va otro de los cuentos que les contaron los alumnos de 6º B a los peques de Infantil. Esta vez nos lo han mandado Carmen Alcántara y Ana Lozano.
¡GRACIAS GUAPETONAS!
Caperucita azul celeste
Érase una vez una niña llamada Caperucita Azul Celeste por que tenía una capa de ese color. Pero esa capa era especial por que se la había cosido su abuelita con un trozo de cielo, pero no es solo eso, como era un trozo de cielo podía controlar el tiempo. Y chicos, ¿dónde está la capa que causó el corte de la abuelita? Pues vosotros no lo sabéis, pero es el agujero por dónde entran los rayos del sol. Y os preguntareis, ¿es que antes no había sol? Pues la verdad es que no. Toda la luz que había era de las farolas, lámparas, velas… Pero, eso fue ya hace muchísimo tiempo, tanto como unos nueve millones de años. Bueno volvamos a la historia.
Caperucita Azul Celeste le iba a llevar a su abuelita un cesta que dentro contenía: pastelitos de nube con miel, galletitas de arco iris y una sopa calentita de rayos de sol, por que la abuelita Paquita estaba malita. Caperucita iba dando saltos de alegría, cantando y cogiendo flores pero… a mitad de camino se encontró con una mujer que vestía con un vestido blanco y…
- ¿Quién eres?
- Soy la Reina de los Hielos
- ¿Tú eres la malvada Reina de los Hielos de la que me han hablado?
- Sí esa soy yo, y ya que sabes que soy malvada, iré rápido, ¿vale?
- Vale y, ¿Qué quieres de mí?
- Tú capa.
- ¿Mi capa porqué?
- Por qué tiene poderes y para que se me sea más fácil te voy a congelar, ¿vale?
- No si te congelo yo primero. ¿Eh? ¿Qué pasa?
- No puedes controlar el hilo, porqué, tienes el corazón transparente, es decir, que eres buena persona y el hielo, solo lo pueden controlar la personas con el corazón negro y la gente mala como yo.
- Pero, pero…
Tú también quieres mi capa, ¿verdad?
- Pues si y rapidito que no hay tiempo.
- ¿Y un trozo te vale?
- Si
- Pues aquí lo tienes, y déjame que llevo prisa.
Pero lo que no sabía el Rey de las almas Oscura es que el trozo que le había dado era un simple trozo de tela azul sin poderes.
Al llegar a casa de la abuelita…
- Hola abuelita.
- Hola, ¿por qué has llegado tan tarde?
- Nada, cosas que me han pasado por el camino. Toma
- ¿Para mí?
- Si, dentro lleva comida para que te mejores y la he cocinado yo con mi mamá.
- Pues muchas gracias cariño.
- De nada y adiós que tengo que volver
- Adiós
Pero lo que vosotros no sabéis es que esto es un simple sueño de Caperucita Roja que fue corriendo a contárselo a sus amiguitas del cole.
ANA LOZANO Y CARMEN ALCÁNTARA (6º B)
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